Tengo Otros Datos

 

Eduardo Esquivel Ancona

 

Incremento de la inflación en mayo por factores climáticos y políticas de Trump

 

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicó este lunes 9 de junio los datos que señalan que la inflación general anual en México durante el quinto mes del año se ubicó en 0.28% mensual y 4.42% anual. Este repunte fue impulsado por los aumentos en los precios del pollo, el jitomate, la carne de res y los costos asociados a la vivienda propia.

 

El dato proporcionado por la institución, presidida por Graciela Márquez, representa una aceleración respecto al 3.93% registrado en abril, aunque se mantiene por debajo del nivel observado en mayo del año pasado, cuando el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) fue de 4.69%. Sin embargo, este comportamiento mantiene la inflación del país fuera del objetivo del Banco de México, que tiene una meta del 3%, con un margen de tolerancia de un punto porcentual.

 

La prolongada sequía en varias regiones del país, aunada al cambio climático, ha provocado malas cosechas, lo que ha reducido la producción del sector agropecuario. A esto se suma la inseguridad en amplias zonas rurales y la intervención del crimen organizado en esta actividad económica, lo que ha contribuido al aumento de los costos de producción de diversas frutas y verduras.

 

Otro factor que ha presionado al alza la inflación es la incertidumbre derivada de las políticas comerciales y arancelarias del presidente estadounidense Donald Trump. Aunque estas políticas han excluido a la mayoría de los productos de exportación mexicanos, han generado tensiones en industrias clave como la automotriz y la siderúrgica.

 

La inflación subyacente, que excluye artículos volátiles como alimentos y combustibles, se aceleró a 4.06% en mayo, frente al 3.93% registrado en abril.

 

Este índice es de especial relevancia, ya que permite a los analistas evaluar la evolución de los precios sin el efecto de eventos coyunturales o transitorios —a menudo externos—, facilitando así el diseño y evaluación de políticas económicas internas.

 

Por su parte, el índice de precios no subyacente —que incluye energéticos y alimentos no procesados— registró un incremento de 0.23% mensual y un aumento del 5.34% a tasa anual. Dentro de este rubro, los productos agropecuarios tuvieron un fuerte incremento mensual de 3.21%, impulsado por alzas en los precios de frutas y verduras (2.80%), especialmente el jitomate, y de productos pecuarios (3.48%), destacando el pollo.

 

 

El entorno económico actual del país plantea importantes retos para la política monetaria de México. La necesidad de equilibrar el control de la inflación con el estímulo al crecimiento económico representa una tarea compleja que requiere decisiones cuidadosas y bien fundamentadas.

 

Ante el repunte de la inflación, el Banco de México se verá obligado a hacer una pausa en los recortes de la tasa de interés de referencia.

 

El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo está implementando una estrategia para aumentar la producción en el campo mediante la ampliación de los distritos de riego en todo el país, el suministro de fertilizantes y otros insumos a los campesinos, y el acompañamiento a los productores para garantizar su seguridad frente al crimen organizado. Estas acciones podrían incrementar la oferta de productos agrícolas y contribuir a la disminución de sus precios.

 

Otro aspecto que podría ayudar a evitar el incremento en los precios de frutas y verduras es la eliminación de intermediarios, acaparadores y coyotes en la cadena de distribución, quienes encarecen los productos agrícolas.


(La columna Tengo Otros Datos se publica en los portales Domo de Cristal y Ekonosphera. Se reproduce con la autorización del autor).